En México, el 55% de la población entre 18 y 70 años tiene un crédito, de este porcentaje, el 70.2% se financió de manera informal y solo el 29.8% lo hizo formalmente, según la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF, 2018) realizada por el INEGI en colaboración con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Las tarjetas de crédito departamentales o de tiendas de autoservicio son el producto de crédito formal que más personas tienen contratado: 15.1 millones de adultos en México, es decir, un 19.1% de la población. No obstante, 8.3 millones tienen una tarjeta de crédito bancaria, es decir, únicamente el 10.4% de la población representada en la misma encuesta.
Muchas personas están usando un crédito de manera informal, con lo que pierden las ventajas que ofrecen, por ejemplo, las tarjetas de crédito bancarias, las cuales suelen ser más baratas que las tarjetas departamentales. Esto resulta en que, el 24% de la deuda de los tarjetahabientes puede estar asociada a elegir mal una tarjeta de crédito y pagar altos intereses, según indicó Bernardo Brum director de Coru, para Forbes.
Quizá por ello, muchos catalogan a las tarjetas de crédito como algo malo, pero esto se debe a una administración equivocada, porque nadie nos enseña a utilizarlas. Por ello, aquí te damos unos consejos, para que le saques jugo.
1. No gastes lo que tienes
Antes que nada, te invitamos a no gastar más de lo que tienes. A veces, tenemos una línea de crédito muy alta, ya sea porque el banco así nos las asignó o porque nosotros aceptamos o pedimos una mayor línea de crédito.
Lo peor es que nadie nos advierte que debemos establecer un límite de acuerdo con nuestros ingresos. A esto se le denomina “capacidad de pago” y nos ayuda a saber cuál es la cantidad de nuestro sueldo exacto para pagar créditos sin endeudarnos.
Los expertos recomiendan no destinar más del 20% de nuestros ingresos mensuales. Utiliza esta calculadora de capacidad de pago mensual. ¡Te hará la vida más fácil!
2. Caza las promociones y meses sin intereses
Lo mejor de las tarjetas de crédito es que tienen benditos meses sin intereses, pero si te van a cobrar más por pagar en parcialidades y, además, pagas anualidad; es mejor buscar otro tipo de préstamo que sea más barato, o bien, aguantar un poco y ahorrar lo que te falte.
Ahora, no todas las tiendas ofrecen meses sin intereses todo el tiempo, así que mantente al pendiente de las promociones de tu banco y espera a las temporadas de ofertas como el HotSale, El Buen Fin, BlackFriday, entre otros.
3. Evita pagar el monto mínimo
Evita a toda costa el pago mínimo. Este es un gran error porque tus meses sin intereses ya no se aplicarán, tardarás en pagar más tiempo y aumentará tu deuda con los intereses que, regularmente, son muy altos y variables.
Conoce qué es la Tiie: el factor que hará variar el costo de tu crédito.
Sabemos que a veces cuesta trabajo resistirse al tarjetazo, por ello, te recomendamos elaborar un presupuesto, para que no te excedas. Consideres que quizá tienes otros metas que pospondrán por más tiempo.
4. Paga a tiempo
Debes saber que si no pagas en la fecha de corte, los intereses se calculan con base en el saldo diario promedio. Por lo tanto, entre más tiempo dejes pasar tu deuda aumentará como una bola de nieve. Además, debes pagar comisiones por gastos de cobranza, entre otros.
Pon alertas en tu celular para pagar en tiempo, también te puedes apoyar de apps como Finerio, que te avisa de las fechas de pago de tus tarjetas, para que no se te pase ninguno.
5. Paga semanalmente
Una tendencia cada vez más fuerte en Estados Unidos es hacer pagos semanales a las tarjetas de crédito. Yo probé este método y la verdad es que hacer pagos pequeños me ayudó a cumplir en tiempo, no te gastas el dinero, y además, alivió la carga psicológica de tener que pagar un gran monto de un solo jalón.
También, debes saber que los intereses de una deuda se calculan con base al monto diario, por lo tanto, esto te ayudará a evitar que crezcan. Una buena idea es abonar una vez que recibes tu quincena, el pago de inversiones o alguien te paga un trabajo.
6. Haz historial crediticio y pide una tarjeta sin anualidad
Paga el total de tus deudas en tiempo durante un año y busca tarjeta crédito que sea más barata, que no cobre anualidad, tenga una baja tasa de interés y te dé más recompensas por tus compras. Por lo general, cuando eres primerizo y nunca antes has manejado algún crédito, los bancos no tienen confianza en ti y por esto, te cobran anualidad, pero si ven que eres buen pagador tendrás más beneficios, claro, en algunos bancos.
Así que, aunque ahora tengas tu tarjeta departamental, en un año puedes cambiar a un mejor producto, pero si no haces un buen historial, es decir, si no haces un pago puntual y total, es probable que rechacen tu solicitud y sigas pagando una tarjeta cara.
6. Utiliza los puntos de tus tarjetas
Varias tarjetas te dan puntos por hacer compras con ellas, esto te puede ayudar a disminuir el pago de tu anualidad. Pero, como dijimos en el punto anterior, si eres un buen pagador puedes pedir una tarjeta sin anualidad y con puntos para comprar cualquier otra cosa.
7. Transfiere tu deuda a un crédito más barato
Si ya te endeudarse y está pagando intereses, te recomendamos ampliamente que busques un préstamo o crédito con una tasa de interés fija más baja, para consolidar tus deudas. Recuerda que, la tasa de interés de las tarjetas son variables y pueden subir de un día para otro.
Por lo tanto, busca, un préstamo con intereses fijos. Puedes ver préstamos en línea que, regularmente, son más baratos.