A todos nos gustaría saber cómo debemos prepararnos para los retos y las etapas de la vida antes de que sucedan. Sin embargo, vamos aprendiendo de nuestros errores con cada experiencia que vivimos, de ahí surge el conocimiento y la madurez. Pero ¿a quién no le gustaría conseguir la sabiduría sin tener que estar tropezando constantemente con las piedras del camino?
Y aunque es imposible saltarse todos los obstáculos que se van a enfrentar, siempre se puede aprender de los errores y las enseñanzas de los demás. Solo debemos estar atentos de lo que sucede a nuestro alrededor. Aprender de los errores de uno mismo para no volver a cometerlos es muy bueno, pero aprender de los errores de los demás para no cometerlos, es doblemente mejor.
Los veintes son de las mejores etapas en la vida. Terminaste la universidad y empiezas a trabajar, tienes un ingreso propio y no muchas responsabilidades. No hay hijos, no hay esposa o esposo, ni problemas significativos de salud. Se dice que cuando uno está en los veintes se pueden experimentar diferentes caminos para encontrar lo que apasiona sin tomarse tan en serio el mundo laboral ni personal.
No obstante, si no eres cuidadoso con las responsabilidades y libertades que tienes, puedes incurrir en errores que tendrán un impacto negativo en tu futuro, es decir en tus 30’s y 40´s. Por eso, Finerio te dice los errores que debes evitar en el ámbito financiero de tu vida y que seguramente ya estás cometiendo. No digas que no, acéptalo y comienza a aprender de las enseñanzas que te damos.
1. No tener un presupuesto
El punto más importante y al que casi nadie presta atención: el presupuesto. No importa cuánto ganes, sino como distribuyes y usas tu dinero. Una persona con ingresos altos puede tener malas finanzas y estar muy endeudado. Una persona con ingresos medios que tiene buenas finanzas es porque tiene planeación financiera.
Para crear un presupuesto personal es necesario que anotes todos tus ingresos (lo que ganas, lo que te regalan, lo que te encuentras) y todos tus gastos (las salidas, las papitas, la comida de tu perro) del mes. Con base en eso te darás cuenta de cuánto es tu gasto total y cuánto presupuesto mensual puedes destinar a cada categoría (hogar, transporte, comida, salud, entretenimiento, etc.). Una vez que eres consciente de eso, sabrás la suma que realmente puedes empezar a ahorrar mes con mes.
La clave para tener un buen presupuesto es no sobrepasarte del límite que asignas a cada una de las categorías, y para eso requieres de disciplina, para registrar tus gastos diariamente y para no gastar de más
¡No te preocupes! Finerio es una plataforma de finanzas personales con la que puedes crear presupuestos personalizados que se actualizan automáticamente sin la necesidad de apuntar tus gastos manualmente. Lo único que apuntarás manualmente serán tus gastos con efectivo. ¿Cómo funciona? Finerio se conecta a tus cuentas bancarias para extraer tu información financiera y categorizarla. Lo único que tendrás que hacer será apegarte a tus presupuestos. Además, ya no gastarás horas actualizando una hoja de Excel. Si te interesa conoce más en www.finerio.mx
2. No ahorrar
“No ahorres lo que te queda después de gastar. Gasta lo que te queda después de ahorrar”. La mayoría de los jóvenes casi no ahorra, o tiene poco control sobre sus ahorros. Así como el dinero viene, se va. No te dejes llevar por la emoción del momento y pregúntate si son realmente necesarios los gastos que estas a punto de hacer: la ropa, las cervezas, las botanas, el viaje, el coche, el celular.
¿Para qué ahorrar? La mayoría de las personas ahorra para metas personales a corto plazo: comprar algo o irse de viaje. Sin embargo, cuando se empieza a ahorrar es fundamental empezar con dos cosas: a) Un fondo de ahorro para emergencias y b) Un fondo de ahorro para el retiro.
El fondo de ahorro para emergencias es crucial en caso de que pierdas tu fuente de ingresos o tengas un accidente. Este fondo debe cubrir tus gastos de 3 a 6 meses. Es decir, si tus gastos mensuales son de 6,000 pesos, tu fondo de ahorro debe ir de 18,000 a 36,000 pesos. Te recomendamos leer ¿Cómo crear fondos de emergencia?
Y si crees que es absurdo pensar en un fondo de ahorro para el retiro, te recomendamos leer ¿Cuánto dinero necesitas ahorrar para cuando seas viejo? Seguramente quedarás con el ojo cuadrado. Entre más temprano empieces, mejor.
Destina un cierto porcentaje de tus ingresos al ahorro. No existe una regla estricta para ahorrar, si te lo propones puedes ahorrar hasta el 50% de tus ingresos.
3. Gastar mucho dinero socializando
Casi todos los jóvenes son víctimas de gastar dinero en cosas banales: restaurantes, fiestas, salidas con los amigos, con la novia o el novio, regalos, conciertos, viajes, etc. No está mal gastar en momentos agradables, pero si esto ocurre muy a menudo significa que probablemente no estás ahorrando, o podrías ahorrar más de lo que crees; además de que has basado tu felicidad y tus tiempos libres en actividades que giran alrededor del dinero. Si intentas otro tipo de actividades verás que la felicidad puede conseguirse sin gastar demasiado.
4. No tener historial crediticio
Muchas personas tienen la idea errónea de que tener una tarjeta de crédito o pedir un crédito es algo muy malo que solo te endeuda. Eso no es así. Cuando las personas tramitan una tarjeta de crédito o piden un crédito personal empiezan a formar un historial crediticio en donde se refleja su comportamiento como deudor. Si siempre pagas a tiempo y haces pagos completos no tienes nada de que preocuparte. El historial crediticio se encuentra en el Buró de Crédito, que es la institución que recolecta esa información financiera. Y no, ¡estar en Buró de Crédito no es malo tampoco! Es lo más normal del mundo.
¿Por qué es importante tener un historial crediticio? Formar un historial crediticio desde temprana edad te ayudará en un futuro cuando quieras sacar un crédito para una casa, para un auto o para tu negocio. Las instituciones financieras al ver tu historial se darán cuenta de que ya tienes antigüedad y confiarán más en prestarte, igualmente, si tu calificación es buena, te otorgarán mejores condiciones y tasas de interés.
Como puedes ver, el historial crediticio abre las puertas a varios créditos. Te recomendamos leer Todo sobre el historial crediticio que siempre has querido saber y ¿Estás en el Buró de Crédito?
5. No pagar a tiempo tu tarjeta de crédito
Existen bancos que son flexibles otorgando tarjetas de crédito a jóvenes universitarios o recién egresados, lo cual es una oportunidad fantástica para que empieces a crear tu historial crediticio. No obstante, si no pagas a tiempo tu tarjeta o solo haces pagos mínimos empezarás a arrastrar deudas con el banco que al final se convertirán en pesadillas que te quitarán el sueño. Lo mejor es que siempre seas totalero (hagas pagos completos) y lo hagas a tiempo.
Recuerda que una tarjeta de crédito no es “dinero extra” del que puedes disponer mes con mes, es dinero que, al fin y al cabo, acabarás pagando. Las tarjetas de crédito son recomendables porque se pueden usar para emergencias o porque ofrecen distintos beneficios. Si quieres tramitar una puedes leer Factores clave a considerar cuando escogemos nuestra tarjeta de crédito
6. Endeudarte
El peor error que puedes tener en tus veintes es comenzar a endeudarte y no esforzarte por salir de esas deudas. Endeudarse es un mal hábito que te acabará consumiendo y desgastando. De ahí la importancia de un presupuesto, porque evitarás gastar dinero que no tienes.
Si ya tienes deudas, te recomendamos terminar con ellas. Te ayudará leer Cómo reducir tu deuda en 3 pasos, en donde se explican varias estrategias.
7. No educarte financieramente
Si vivimos en un sistema que se mueve a través del dinero, lo más prudente sería aprender cómo funciona este para poder usarlo a nuestro favor. En nuestro país, la educación financiera es casi nula; sin embargo, eso no significa que nosotros tengamos que quedarnos en blanco.
Seguramente cuando has ido al banco, cuando has escuchado de inversiones, de préstamos y de finanzas personales te has quedado con cara de “what”, y hasta sientes que te ven la cara de tonto. Es un hecho que necesitas conocer ciertos términos financieros para que entiendas de que te están hablando cuando quieras sacar tu tarjeta de crédito o quieras contratar un servicio financiero. Verás que no es nada del otro mundo si empiezas a investigar poco a poco.
Dedica unas 2 horas a la semana a educarte financieramente. Suscríbete a nuestro blog y aprende de finanzas personales, te enviaremos el mejor contenido de Finerio. ¡Cero spam!
8. No invertir
El último error que puedes cometer, pero no el menos importante es no invertir tu dinero. ¿Invertir? Así es, suena complejo, pero no lo es. Ahora ya existen diversas plataformas de inversión que son online y con las que puedes comenzar desde 100 pesos.
Invertir es fundamental para que tu dinero no pierda valor con el tiempo, es decir, con la inflación. Ahora ya no es útil que ahorres y dejes tu dinero debajo del colchón o en una cuenta bancaria que no te genera rendimientos, porque ese dinero en unos años valdrá menos de lo que vale hoy.
Y si no te convences, te decimos la mejor razón para que empieces a invertir: generar ingresos sin tener que trabajar.
Te recomendamos leer 5 inversiones que los millennials podemos hacer.
Ahora ya sabes los errores que debes empezar a evitar, y que seguramente ya estabas cometiendo. Pero, recuerda que, si aprendes de estas enseñanzas y las aplicas, en unos años ya no tendrás que tropezar con esas piedras. Estas enseñanzas las aprenderás de uno u otro modo, pero mejor que sea por la buena. ¿Qué opinas? ¿Agregarías algo más?