¿Netflix podrá cambiar el modelo de negocio del cine después de “Roma”?
¿Por qué Cinepolis y Cinemex no exhiben el filme “Roma” de Alfonso Cuarón? ¿Qué implicaciones tiene que no sea proyectado en las salas comerciales? ¿Los cines tradicionales cambiarán su sistema de exhibición?
Estas fueron algunas de las preguntas que desató la película “Roma”, debido a que en México y en otros países no fue estrenada en cines comerciales.
“Roma” ganó el León de Oro a la mejor película en el Festival Internacional de Cine de Venecia en septiembre de 2018. Desde entonces ha recorrido distintos festivales y ha sido aclamada por la crítica.
No obstante, previo a ello, en abril de 2018, se anunció que Netflix había adquirido los derechos de distribución de la cinta. Desde este punto, era de esperarse que “Roma” se estrenaría directamente en su plataforma, ya que su estrategia ha sido brindar contenido exclusivo a sus usuarios.
Pero como seguramente recordarás, los filmes Okja y The Meyerowitz Stories que fueron estrenados únicamente en Netflix el año pasado, no pudieron competir por la Palma de Oro en el Festival de Cannes. Las reglas del Festival dictan que cualquier film que aspire a ganar la prestigiosa condecoración, debe exhibirse antes en Francia.
Por lo tanto, ante el impedimento de participar en Cannes, este año Netflix decidió estrenar “Roma” en algunas salas de cine antes de su presentación en la plataforma de streaming el 14 de diciembre, a fin de poder competir por diversos premios, entre ellos, los Oscars.
Entonces ¿por qué Cinepolis y Cinemex no exhiben “Roma”?
Las cadenas Cinépolis y Cinemex pidieron a Netflix respetar la llamada “ventana de distribución”, un periodo de 90 días de exclusividad. Luego de ese tiempo, la película se podría exhibir en la plataforma de streaming.
Cinépolis invitó a Netflix a posponer el estreno de la cinta en su plataforma, con el objetivo de proyectarla a gran escala en cines comerciales.
Netflix, respetando su modelo de negocio, al igual que Cinépolis, no accedió a posponer el estreno.
Alfonso Cuarón comentó: “La película se les ofreció a Cinemex y Cinépolis pero ellos querían una ventana demasiado grande… y yo lo entiendo porque responden a su modelo económico pero es algo que está cambiando”.
Por lo tanto, solo las salas que acepten las condiciones de Netflix, pueden exhibir la cinta. En este momento, las salas independientes han agotado sus entradas, The Movie Company, en la Ciudad de México es quizá uno los pocos complejos que, aún tiene entradas.
¿Qué son y cómo funcionan las ventanas de distribución en el cine?
El sistema de “ventana de distribución” se inventó en los años 80 para que una película no compitiera contra ella misma en el mismo medio, es decir, con el fin de que una película genere todas las ganancias posibles en cada canal de distribución.
Se estrena primero en el cine porque para dicha década era lo que más recaudaba recursos. Después se estableció que, pasando alrededor de cuatro meses, se estrenaría en la televisión de paga y, finalmente otros meses más, se distribuiría en los sistemas de alquiler, o bien, se transmitiría en la televisión abierta y, ahora, en plataformas como Claro Video o Netflix.
Con el tiempo se dio la posibilidad de estrenar películas de manera simultánea, tanto en cine como en la televisión de paga, o salir directamente a DVD. Esto ha ido sucediendo con base a las necesidades principalmente de los productores, considerando, por ejemplo que, si la primera película de una secuela no tiene el éxito esperado en taquilla, es mejor que las demás salgan directo en DVD o en televisión de paga.
La rapidez en la distribución propiciada por el avance de la tecnología y del surgimiento de plataformas como Netflix ha sido una de las claves en la diminución de las ventanas de distribución en los cines.
En consecuencia, el debate se traslada a ¿cuánto tiempo debería durar una ventana de distribución?
Cómo puede renovarse el tiempo de exclusividad de una película en el cine
De acuerdo con un estudio de Disney, el 95% de los tickets se venden durante las primeras 6 semanas. Por lo tanto, si hay una ventana de distribución de dos semanas le dejará un margen de ganancia mucho menor a los cines tradicionales.
No obstante, se debe considerar que los hábitos de consumo de cine ya no son los mismos que antes. Varios participantes de la industria coinciden en que las ventanas de distribución deben adaptarse a la demanda de la audiencia.
Es decir, si una película ha tenido un gran éxito en los cines tradicionales, debería de poder mantenerse por más tiempo. Pero lo cierto es que, muchas veces las películas que no tienen suficiente audiencia en la primera semana son retiradas de las salas, y en diversos casos, resulta imposible encontrarla en otros medios.
Por otra parte, si una película no ha tenido una respuesta favorable o simplemente el público al que va dirigido no asiste al cine, debería de tener la oportunidad de reducir las ventanas de distribución para que esté disponible en otros medios, ya sea en internet o televisión de paga.
¿Netflix podrá cambiar el modelo de negocio del cine tradicional?
Jorge Fernando Negrete, presidente de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi) en 2016, dijo que la industria del cine se ha defendido desde el invento de la radio, televisión y, ahora, servicios de televisión de paga por internet (Over The Top) por lo que no ve que sea sustituida por otro tipo de oferta”.
Del servicio de streaming, comentó que es complementario a la experiencia del cine. “Todavía no tenemos elementos que digan que el las películas en casa le quita terreno al cine, por el contrario el cine crece en salas”, subrayó.
Javier Ezquerro, director general de operaciones de Cinemex, detalla que la propuesta de valor “es la experiencia, ninguna plataforma de entretenimiento en casa logra igualar las sensaciones que vive la gente cuando asiste al cine: pantalla gigante, sonido inigualable gracias a tecnología avanzada en proyección y audio, una oferta variada y de calidad en alimentos”.
México es el cuarto país con mayor número de boletos vendidos en el mundo en 2017. Para ser exactos, el año pasado se vendieron 348 millones de boletos y en las taquillas de cine se recaudaron más $16 mil millones de pesos/MXN, según datos de Canacine.
Por otra parte, un análisis realizado por Citibanamex, afirmó que se espera que un tercio (30%) de los hogares mexicanos pague por los servicios de OTT, para 2025. El estudio también indicó que el mercado mexicano de videos de OTT generará más de $220 millones/USD (alrededor de $4 mil millones de pesos/MXN) de ingresos en menos de diez años. Lo que aunque es una gran rebanada del pastel, aún no supera las ganancias del cine, antes mencionadas, las cuales no incluyen el negocio de las palomitas y el refresco.
De esto podemos concluir que, por el momento, el cine en México seguirá teniendo un lugar importante, de ahí la exigencia de la audiencia de pedir que se proyecte en los cines una película como la de Cuarón. Netflix por el momento no pudo cambiar parte del modelo de negocio de los cines tradicionales, pero puso, intencionalmente o no, el dedo en la llaga para reducir los tiempo de exclusividad, lo que por supuesto, implica una resta a las salas cine tradicional.
El objetivo en todo caso, será llegar a un acuerdo en el que vea beneficiada la audiencia. Pero además, esta discusión deja en la mesa otros temas como gastos de las personas en cine o exhibición de películas independientes, que al parecer quedan en el limbo, entre estos tres competidores, Cinépolis, Cinemex y Netflix.